Cada bebé es especial y único

Esto quiere decir que cada niño va a su propio ritmo, unos hablan más rápido que otros, unos son más móviles que otros, unos caminan más pronto, dejan el pañal más rápido, etc… y esto no los hace más inteligentes, ni más avanzados, simplemente lo hicieron antes y punto.

Si todo el tiempo estás comparando a tu bebé con otros, algunas veces estarán intranquilos sin fundamento.

Mira el desarrollo de tu bebé y respeta sus ritmos, compara su desarrollo y avances con respecto a él mismo, si notas retrasos en el desarrollo o demoras muy prolongadas para ciertos logros, consulta a tu pediatra para estar seguros que el proceso va de forma normal.

Porque aun cuando cada uno tiene su ritmo, y hay que respetarlo, hay unos tiempos madurativos que se deben cumplir en un lapso normal de tiempo.

A veces escucho a madres decir que todo es normal, y a veces irresponsablemente tranquilizan sin tener conocimiento.

El pediatra o especialista es la única persona idónea para contestar nuestras inquietudes.

Y no olviden, es creer en la intuición que tenemos los padres.

¡Creer es la intuición!